Este miércoles 10 se realizó en todo el país la Jornada de lucha que fuera convocada inicialmente por las organizaciones estudiantiles (FESE - estudiantes secundarios - y FEUE - estudiantes universitarios) y la JRE (Juventud Revolucionaria del Ecuador) y a la que se sumaron las organizaciones del Frente Patriótico.
En horas de la mañana, se realizaron grandes marchas estudiantiles y también importantes concentraciones de maestros agrupados en la Unión Nacional de Educadores (UNE). En todas las marchas se hicieron presentes con sus banderas los militantes del PCMLE, del MPD, y del Frente Popular. Las marchas se unieron en el centro de las ciudades, alrededor de la casa de gobierno en Quito y de las gobernaciones en provincias.
La policía hizo todo lo posible por impedir estas marchas, a pesar de que se había anunciado que estaban autorizadas. No solo arrestaron a estudiantes, sino que ingresaron a casas de distintos barrios para detener a aquellos que huían de la represión.
En Quito, las marchas se dirigían al Palacio Presidencial para entregar una propuesta de medidas alternativas que permiten rescatar más de 11.000 millones de dólares que han sido entregados a los ricos o evaden del pago de impuestos. Con el paquetazo antipopular el gobierno recuperaría poco más de mil millones de dólares, pero escoger estas medidas es una prueba del carácter de clase del gobierno y su sumisión ante el FMI.
Los manifestantes rodearon el centro de Quito y decenas de ellos, encabezados por Luis Villacís, Presidente del Frente Popular y vocero del Frente Patriótico, lograron romper los cercos policiales e ingresar a la Plaza Grande, donde realizaron un mitín permanente contra el gobierno, mientras en el interior del Palacio el Presidente de la República recibía a los Embajadores acreditados en el país, los jefes de las Fuerzas armadas, la Policía y la Iglesia Católica.
Villacís estuvo acompañado por dirigentes de la UNE, la FESE, FEU, Confederación de Mujeres Ecuatorianas por el Cambio, Stalin Vargas (diputado del MPD) y otros dirigentes del Frente Popular. Permanecieron en la Plaza hasta que la policía, reforzada por varias unidades, los desalojó.
En la calle Guayaquil, del centro histórico de Quito, estalló una bomba panfletaria del grupo denominado Grupo de Combatientes Populares (GCP). Cuando la policía intentó detener a un sospechoso, la población lo impidió. Esta misma acción solidaria se ha presentado en defensa de los estudiantes perseguidos en las manifestaciones.
En Guayaquil, fue importante la acción de los estudiantes de la universidad estatal, que rechazan la actitud de su rector, cómplice de la represión y el gobierno en el afán de querer impedir las protestas. Los estudiantes señalaron que el rector, León Roldós, "habla de la autonomía universitaria para elevar los costos de la educación, los precios de los aranceles, ampliar las medidas para impedir el libre acceso, pero para él no hay autonomía cuando se trata de que la policía ingrese para agredir a los estudiantes, en especial a los de izquierda y de origen popular".
Por la tarde, en todas las ciudades se realizaron nuevas marchas unitarias en las que participaron organizaciones populares, barriales y sindicatos de distintas empresas públicas y privadas. Este es un hecho importante porque demuestra la cada vez mayor incorporación popular a las jornadas de lucha y crea mayor interés en la Asamblea Unitaria de los Pueblos del Ecuador ha realizarse este sábado 13 desde las 9 de la mañana en la Universidad Central de Quito.
La fuerza de la lucha popular del día 10, encabezada por el Frente Popular y el Frente Patriótico, se extendió a zonas urbanas y rurales. Tras ella vendrán nuevas acciones contra el paquetazo del gobierno burgués y proimperialista de Noboa. En la lucha, crece el debate sobre la necesidad de un gobierno popular revolucionario, hacia donde debe avanzar el pueblo ecuatoriano.
10 de enero de 2001
José Izquierdo
Periódico En Marcha
PCMLE
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